Luis F. Leloir recibió el Premio Nobel de Química en 1970 por su descubrimiento de los nucleótidos-azúcares y su papel en la biosíntesis de carbohidratos. Sus aportes científicos en dicha línea de investigación, de suma importancia para el campo de la Medicina y la Química Biológica, permitieron dilucidar el mecanismo de síntesis de compuestos biológicos en los cuales los azúcares están unidos entre sí o a otras moléculas biológicos de naturaleza muy diversa. Los nucleótido-azúcares resultaron ser piezas fundamentales tanto en el mecanismo de síntesis ya mencionado, como en la interconversión entre azúcares.
Estos hallazgos, iniciados hacia finales de los años cuarenta, convirtieron al Instituto de Investigaciones Bioquímicas Fundación Campomar hoy Fundación Instituto Leloir- lugar donde Leloir y su equipo desarrollaron sus investigaciones- en un centro de excelencia y referencia internacional.
Con una personalidad de bajo perfil pero intensamente comprometido con su país y con el desarrollo científico de éste, Leloir fue un precursor y un modelo a seguir por futuras generaciones. La relevancia de sus aportes a la ciencia está muy bien descrita en un párrafo del anuncio oficial del otorgamiento del Premio Nobel:
“Pocos descubrimientos han tenido tanto impacto en la investigación bioquímica como los de Leloir. Su trabajo, y el trabajo inspirado por él, nos han dado un conocimiento real en amplios campos de la bioquímica, donde antes teníamos que recurrir a hipótesis vagas.
Se puede apreciar fácilmente que su trabajo también tiene amplias consecuencias en fisiología y medicina”.
Extracto de la carta enviada al Dr. Leloir con el anuncio del otorgamiento del
Premio Nobel de Química 1970.
Instituto Nobel.
Real Embajada de Suecia, 1970
Contenido
Accedé a materiales únicos y, en algunos casos, inéditos, acerca de la máxima distinción que recibió Luis Federico Leloir: El premio Nobel en Química. La documentación reunida te ayudará a comprender la trascendencia de su trabajo.